¡Que nadie te robe la corona de la verdad y la justicia!

“He aquí que vengo pronto; retén lo que tienes, para que nadie tome tu corona”. (Apocalipsis 3:11)

Debido a la “hora de la tentación”, Jesús da la advertencia: “retén lo que tienes, para que nadie tome tu corona”. El hombre no ha terminado su egoísta y sucia obra de robo: “El ladrón no viene sino para hurtar y matar y destruir” (Juan 10:10) Jesús les instruye a “retener lo que tenéis”. Filadelfia tenía una gran luz espiritual sobre: la salvación, la santificación, la unidad verdadera, el amor bíblico, la iglesia verdadera y los juicios contra la religión falsa. Este entendimiento y experiencia es la “corona” que los hombres quisieran robarle a la iglesia.

En Apocalipsis 12:1 nos ha revelado un cuadro espiritual de la verdadera iglesia de Dios, y la corona que ella tiene:

“Y apareció una gran maravilla en el cielo; una mujer vestida del sol, y la luna debajo de sus pies, y sobre su cabeza una corona de doce estrellas. Y estando encinta, lloró, con dolores de parto, y dolorida de dar a luz. Y apareció otra maravilla en el cielo; y he aquí un gran dragón rojo, que tenía siete cabezas y diez cuernos, y siete coronas sobre sus cabezas. Y su cola arrastró la tercera parte de las estrellas del cielo, y las arrojó sobre la tierra; y el dragón se paró delante de la mujer que estaba para dar a luz, para devorar a su hijo tan pronto como naciera.” (Apocalipsis 12:1-4)

Esta imagen pura de la iglesia muestra que está revestida de la luz del Nuevo Testamento, la luz de Jesucristo. (Ver también Apocalipsis 21:1-11) Ella tiene la luna bajo sus pies como lugar para pararse. La luna es un reflejo de la verdadera luz del sol (no tan brillante, pero una luz en la oscuridad de la noche, o el Antiguo Testamento). El Antiguo Testamento nos da una luz que en realidad presagia la luz verdadera: Jesucristo. Sobre su cabeza hay una corona de doce estrellas. Recuerde del capítulo uno de Apocalipsis que Jesús nos dice que las estrellas representan a los ángeles mensajeros de la iglesia. Las doce estrellas representan las enseñanzas con las que la iglesia está coronada por los doce apóstoles del Cordero que fueron enviados por Jesús y nos enseñaron el evangelio de Jesucristo.

Pero ahora Jesús nos está advirtiendo “retén lo que tienes, para que nadie tome tu corona”. Entonces, en Apocalipsis 12, vemos los poderes de Satanás obrando a través de personas representadas en forma de dragón, listas para devorar a los que han sido salvos, incluso tan pronto como nazcan espiritualmente. Debemos estar en guardia y resistir las tentaciones del pecado, las falsas enseñanzas y las presiones de las personas de mentalidad religiosa, para que no nos vuelvan a cegar de la verdad y nos roben por completo nuestra recompensa eterna por permanecer fieles y verdaderos:

• “Los simples heredan necedad, pero los prudentes se coronan de sabiduría”. (Proverbios 14:18)
• “Bienaventurado el varón que soporta la tentación, porque cuando fuere probado, recibirá la corona de la vida, que el Señor ha prometido a los que le aman.” (Santiago 1:12)

Pero recuerde, Jesús advirtió: “He aquí, vengo pronto”, por lo tanto, ¡no se desanime ni se deje robar su corona, que representa su recompensa! “Y he aquí, vengo pronto; y mi galardón conmigo, para recompensar a cada uno según sea su obra”. (Apocalipsis 22:12)

“Apacentad la grey de Dios que está entre vosotros, cuidando de ella, no por fuerza, sino voluntariamente; no por dinero sucio, sino de una mente lista; ni como teniendo señorío sobre la heredad de Dios, sino siendo ejemplos del rebaño. Y cuando aparezca el Príncipe de los pastores, recibiréis un corona de gloria que no se desvanece.” (1 Pedro 5:2-4)

“He peleado la buena batalla, he acabado la carrera, he guardado la fe; por lo demás, me está reservada una corona de justicia, que el Señor, juez justo, me dará en aquel día; y no sólo a mí, sino también a todos los que aman su venida.” (2 Timoteo 4:7-8)

La iglesia tiene una “corona de doce estrellas” (ver Apocalipsis 12:1 arriba) que representa las verdades puras que los Apóstoles del Cordero nos entregaron originalmente acerca de Cristo y su plan. ¡Que podamos “aferrarnos” fervientemente a estas verdades puras, sin la mezcla de falsas enseñanzas, para que nadie pueda robarnos nuestra corona y nuestra recompensa eterna!

Note dónde está este mensaje a Filadelfia dentro del contexto completo del mensaje completo de Apocalipsis. Véase también el “Hoja de ruta de la Revelación.”